Un viejo ferrocarril nos conduce del Tajo a Tajuña
Hasta 1953, la desaparecida estación madrileña del Niño Jesus acogió en sus vías a los trenes que surcaron la vega del Tajuña. Hoy este trazado permite realiizar, en su parte final un recorrido fantástico de 21 Km desde las tierras alcarreñas de Yebra hasta Ambite.
La ruta
El ferrocarril de Tajuña ha sido acondicionado como vía verde en un tramo de 34 Km en la comunidad de madrid (Volumen 2 de la guía de Vías Verdes) Esperemos que en un futuro se recupere el trazado de este ferrocarril desde entrepeñas, En el Tajo, hast enlazar con la comunidad de Madrid con la comunidad de Madrid. Cuando esto sea así, muchas de las dificultades aquí narradas serán historia pasada. Pero mientras llega esta feliz fecha, describiremos el estado actual de la ruta, los posibles problemas y las soluciones que planteamos.
Otra advertencia previa a la ruta se encuentra dividida en dos sectores consecutivos.
El primero de 13 Km, desde Yebra hasta Modejar, es accesible para todos los usuarios sin especiales problemas.
En el tramo entre Mondéjar y Ambite (8Km), la plataforma ferroviaria presenta actualmente una densa capa de piedras que hacen su recorrido imposible para los ciclistas y muy fatigoso para los caminantes.
Para los ciclistas (y también para los andarines) hay una posibilidad de conectar los tramos extremos por pistas rurales o bien por la carretera, pero ya fuera absolutamente de los parametyros de facilidad y seguridad propios de las Vías Verdes.
De Yebra a Mondéjar
Con todo esto sabido, nos ponemos en camino en la localidad de Yebra, punto desde el que el ferrocarril presenta unas aceptables conciciones de recorrido. Partiremos desde las instalaciones deportivas municipales, ya que tanto las piscinas como el fronton y el campo de fútbol están aposentados dende antaño hacían sus maniobras las locomotoras del tajuña.
En un evocador ( y por otra parte reciclador) ciertamente interesante, los munícipes de Yedra decidieron recuperar los elementos de nobles del antiguo edificio de la estación para integralrlos en los nuevos inmuebles del polideportivo. Así, los sillares de cantería de las esquinas de los edificios y las dovelas que formaban las puertas y las ventanas han sido integradas en el vestuario y la cantina de la piscina. Incluso el viejo rotulo de la estación que avisaba a los viajeros del lugar donde se encontraban ha conseguido un buen acomodo en la pared de la cantina.
Ubicados, pues, en el principio de nuestro camino, nos dirigiremos hacia el gran tapial del frontón local. La vía va dejando atrás el casco urbano de Yedra, remontando una suave pendiente. Una amplia curva hacia la izquierda nos enfila hacia un paso superior de camino, labrado en piedra, cerdadero arco de triunfo desde el que decimos adiós a las tierraqs de Yebra y nos dirigimos, por u ancho y cómodo vial, hacia un pequeño colladfo. Este paso fue sobreexxcavado por el trazado del ferrocarril, que separó aún mas las lomas de Espera Alta y Valdezorita.
Cruzado este profundo tajo, nuestra traza describe una nueva curva hacia la izquierda, entrando en un tranmo de 400m en el que el firme pierde calidad ostensiblemente. Para los ciclistas recomendamos usar el camino rural que ese separa de la vía hacia la derecha y que, al final de es tramo, vuelve a incorporarse a la vía. Los caminantes pueden tomar la misma opción, disfrutando así de un firme mas suave, aunque de perfil algo mas escarpado. En el trazado ferroviario no hay mas obstáculos que la incomodidad de las piedras de la vía y alguna rala (y espinosa) vegetación ocupando parte de la explanación.
Tras este fugaz divorcio de caminantes y ciclistas, todos vuelven a trotar parejos hacia Pozo de Almoguera por un sector donde se suceden terraplenes y trincheras de porte moderado. En algunos tramos menudea un poco el balasto, pero el paso de algun tractor ha compactado los guijarros, haciendo el recorrido mas llevadero. Ademças, en muchos casos se dispone de un camino en tierra adosado que puede esquivar estos tramos algo pedrjosos.
Entre tierras de labor, que poco a poco van invadiendo la antigua traza del ferrocarril, nos acercamos al siguiente pueblo. En este tramo veremos como un antiguo puente ferroviario fue parcialmente desmantelado para aprovechar sus nobles sillares, pero esto no supone obstçaculo alguno, esquivandolo facilmete por un margen.
En el Km 5,5 de nuestra ruta, se presenta el pequeño pueblo de Pozo de Almoguera. sus calles y plazas nos ofrecen un lugar par el descanso. Mientras, la vía cruza una modesta carrera local, ahora a nivel, aunque aun se levanta el puente quye el ferrocarril construyó para superarla. Al otro lado del puente se inicia la explanación de la desaparecida estación de El Pozo de Almoguera. Nada queda ya de edificios ni andenens. Un polideportivo ha ocupado el solar ferroviario y en breve, está previsto que nuevas dotaciones de ocio deportivo se asienten en este paraje.
y mientras la futura Vía Verde no se desarrolle plenamente sobre este viejo ferrocarril, el tramo desde la carretera hasta la estación será de ida ny vuelta, ya que una gran escombrera se ha acomodado en la explanación ferroviaria, siemdo casi imposible pasar sin lastimarse. Por ello nos acercaremos de nuevo a las casas de Pozo de Almoguera, concretamente hasta la ermita de Nuestra Señora de los remedios.
Junto a este templo marranca una ancha pista de tierra hacia la derecha que, en su primera bifurcaciuón hacia la derecha, nos situa de nuevo en la vía.
Tras el basurero, la vía prosigue de nuevo sobre un tramo de buena calidad que, entre viñas, nos va acercando, en tan solo 7 Km al pueblo mas importante de esta comarca alcarreña: Mondéjar. La vía penetra en su casco urbano junto a unas ruinas góticas mas que venerables, las del convento de san anton.
La estación de Mondéjar (Km 13), al igual que las del Pozo y Yebra, También es asiento de nuevas dotaciones deportivas: concretamente la piscina municipal. Pero además de esta opción lúdica y refrescante, hasta hace muy pocos años, el recinto de la estación fue complejo escolar. sede de un amplio complejo escolar.
La paradoja adicional de este enclave es que el viejo edificio de la estación no desapareció ante el nuevo uso docente del recinto, sino que fue utilizado como parte del instituto de bachillerato. Con un poco de atención es fácil ver los sobrios sillares de la vieja estación bajo los modernos materiales empleados para levantar el nuevo instituto.
Desde la estación merece la pena acercarse al centro de Modéjar, que gravita en torno a la plaza al pie de la iglesia y el ayuntamiento los p´rticos de la plaza son un buen lugar para reposar antes de afrontar el siguiente tramo hasta Ambite, que tiene alguna particularidad que hay que citar especialmente.
El monte de Umbría
Como se indicaba al principio, los siguientes 8 Km, en los que la vía penetra en la comunidad de Madrid, son transitables exclusivamente (y de forma un tanto penosa) a pie. Una densa capa de balasto hace que a las bicicletas le sea practicamente imposible rodar.
Así, los ciclistas, si quieren enlazar con la vía verde perfectamente acondicionada que sale de Ambite, tienen la opción de ir bien por la carretera, alternativa mas peligrosa; o bien por los caminos rurales que atajan toda la curva que traza el ferrocarril, por la cara sur del monte de la Umbría. Estos caminos, reflejados en la cartografía recomendada, dejan al ciclista en un monte sobre la estación, desde donde podrá descender, por una pista especialmente empinada, hasta alcanzar de nuevo la vía. Esta segunda alternativa se desarrolla en 6 Km.
Por su parte, los caminantes tampoco disfrutaran sobremanera de la fakírica alfombra de las piedras de la vía entre Modéjar y Ambite. Para rematar la faena, hay que señalar que un par de trincheras presentan importantes derrumbes que, afortunadamente, podrán ser superados fácilnmente por los caminantes.
Lo que si puede compensar el afrontar este aparente Via-crucis es el disfrute de un maravillosos bosque mediterraneo: el monte de La Umbría.
Este quebrado monte es cruzado por un atrevido trazado que taja el monte por grandes trincheras, despegándose del suelo en señeros terraplentes y, sobretodo, en cuatro espectaculares viaductos de sillería.
El primero de ellos se sitúa al poco de superar la última casa de Monéjar. Un largo puente de múltiples arcos, cruza en curva la carretera de Mondéjar, internandose a continuación en el fragoso monte de la Umbría.
Entre quejíos, encinas y una variada suerte de matorrales, la pétrea alfombra nos va llevando en un suave descenso hacia tierras madrileñas, entrando en esta comunidad por tierras de Ambite según el viajero se aproxima al pueblo, el paisaje se va aclarando y va ganando importancia el matorral frente a los árboles. Al tiempo, la vía, a modo de atalaya, irá mostrando unas hermosas y desconocidas de perspectivas del Valle del Tajuña.
La llegada a Ambite, a 21 Km del origen, obsequia al viajero con el trénsito por un vertedero que conviene atravesar ligero. Ésta será una breve prueba tras la cual se llega a la estación, que aún conserva todos sus edificios en relativo buen estado. Está prevista la apertura de un bar en uno de los inmuebles de esta antigua estación.
La palya de vías ha sido reutilizada para dar cobijo a un campo de fútbol donde completar los esfuerzos que venimos desarrollando.
Molinos del Tajuña
En la otra orilla del Tajuña (que desde aquí se situa a pocos metros del trazado) se ubica Ambite, pueblo que descuelga por una vertiginosa ladera.
Junto al puente que salva al cauce fluvial se divisa el primero de los sucesivos molinos que tamizaban los caudales de este río.
Un denso pinar de repoblación despide al caminante al salir de la estación de Ambite. Al término del bosque, una pequeña área recreativa con fuente es un hermosos luhgar para contemplar esta pequeña localidad, la primera ya en tierras de la comunidad de Madrid. En ella podremos disfrutar de la Vía Verde del Tajuña (I), acondicionada en toda regla a través de 34 Km de delicioso recorrido por la Vega que Antaño viera pasar a los trenes remolacheros.
Variedad de cultivos, molinos y pueblos con sabor jalonan un hermoso itinerario por la Vega del Tajuña desde Ambite hasta Morawsta de Tajuña.
La descripción de este itinerario aparece en el segundo volumen de la guía de Vías Verdes: Vía Verde del Tajuña (I).
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=»1/4″][vc_raw_html]JTNDYSUyMGhyZWYlM0QlMjJodHRwJTNBJTJGJTJGbG9yYW5jYS5vcmclMkZ3cC1jb250ZW50JTJGdXBsb2FkcyUyRjIwMTUlMkYxMSUyRlZpYS1WZXJkZS0yNC5qcGclMjIlMjByZWwlM0QlRTIlODAlOURsaWdodGJveCVFMiU4MCU5RCUzRSUzQ2ltZyUyMHNyYyUzRCUyMmh0dHAlM0ElMkYlMkZsb3JhbmNhLm9yZyUyRndwLWNvbnRlbnQlMkZ1cGxvYWRzJTJGMjAxNSUyRjExJTJGVmlhLVZlcmRlLTI0LmpwZyUyMiUzRSUzQyUyRmElM0U=[/vc_raw_html][/vc_column][vc_column width=»1/4″][vc_raw_html]JTNDYSUyMGhyZWYlM0QlMjJodHRwJTNBJTJGJTJGbG9yYW5jYS5vcmclMkZ3cC1jb250ZW50JTJGdXBsb2FkcyUyRjIwMTUlMkYxMSUyRlZpYS1WZXJkZS0yMy5qcGclMjIlMjByZWwlM0QlRTIlODAlOURsaWdodGJveCVFMiU4MCU5RCUzRSUzQ2ltZyUyMHNyYyUzRCUyMmh0dHAlM0ElMkYlMkZsb3JhbmNhLm9yZyUyRndwLWNvbnRlbnQlMkZ1cGxvYWRzJTJGMjAxNSUyRjExJTJGVmlhLVZlcmRlLTIzLmpwZyUyMiUzRSUzQyUyRmElM0U=[/vc_raw_html][/vc_column][vc_column width=»1/4″][vc_raw_html]JTNDYSUyMGhyZWYlM0QlMjJodHRwJTNBJTJGJTJGbG9yYW5jYS5vcmclMkZ3cC1jb250ZW50JTJGdXBsb2FkcyUyRjIwMTUlMkYxMSUyRlZpYS1WZXJkZS0yMi5qcGclMjIlMjByZWwlM0QlRTIlODAlOURsaWdodGJveCVFMiU4MCU5RCUzRSUzQ2ltZyUyMHNyYyUzRCUyMmh0dHAlM0ElMkYlMkZsb3JhbmNhLm9yZyUyRndwLWNvbnRlbnQlMkZ1cGxvYWRzJTJGMjAxNSUyRjExJTJGVmlhLVZlcmRlLTIyLmpwZyUyMiUzRSUzQyUyRmElM0U=[/vc_raw_html][/vc_column][vc_column width=»1/4″][vc_raw_html]JTNDYSUyMGhyZWYlM0QlMjJodHRwJTNBJTJGJTJGbG9yYW5jYS5vcmclMkZ3cC1jb250ZW50JTJGdXBsb2FkcyUyRjIwMTUlMkYxMSUyRlZpYS1WZXJkZS02LmpwZyUyMiUyMHJlbCUzRCVFMiU4MCU5RGxpZ2h0Ym94JUUyJTgwJTlEJTNFJTNDaW1nJTIwc3JjJTNEJTIyaHR0cCUzQSUyRiUyRmxvcmFuY2Eub3JnJTJGd3AtY29udGVudCUyRnVwbG9hZHMlMkYyMDE1JTJGMTElMkZWaWEtVmVyZGUtNi5qcGclMjIlM0UlM0MlMkZhJTNF[/vc_raw_html][/vc_column][/vc_row]